Antonio Miranda

Portada
Sebastian Abdala
Antonio Miranda
Oscar Achá E
Scosceria de Cañellas, Lucía
Carlos Barbarito
Juan Carlos Vásquez
Clara Cerati
Hernan Tenorio
Luis Benitez
Feliciano Mejía Hidalgo
Maialen
Adriana Serlik
Homenaje
Visual
Letras Libres
Colaboraciones
Libro de Visitas
Sumario
borges0.jpg

BORGES

Poema de Antonio Miranda 

Para Elga Pérez Laborde

Trad. de Trina Quiñones

 

 

En el laberinto de los espejos

por caminos multiplicados

al infinito; allá en lo hondo

o en el comienzo.

 

Donde el tiempo y el espacio

se confunden, porque

coexisten memorias

del olvido.

 

En territorio ampliado

extendido, más allá de los planos

y altiplanos sucesivos,

transformados.

 

Paisajes mutantes, más bien

espejismos, tal vez, pasajes

o extravíos entre el todo

y la nada absoluta.

 

Allá está aquella máscara deforme

que encubre otra cara

que oculta otras tantas más:

metamorfosis.

 

 

 

Desvendamientos, desvelamientos

extractos, estratos, desconciertos.

Un ser que no existe más,

nunca más.

 

O que existe en transición.

Un ser de superficies, camadas

en una coraza de resistencias

imposibles.

 

II

 

Un ser en quien no me reconozco

que siendo deja de existir

que no tiene comienzo ni

principio (s).

 

Un ser en precipicios, levitando

sobre los espacios y los tiempos

de un esclarecimiento -  o sentimiento

de universo.

 

En un territorio de realidades

que serían transfiguraciones

encuentro a Borges, onírico, flotando

entre las palabras.

 

O por los sentidos, presentimientos

resistiendo sobre mitos y ruinas

latentes, en el sentido de los sueños

consentidos.

 

Referencias, transparencias,

trascendencias. Sueños soñados

o rumiados, o imaginados,

esencias.

 

Borges confiesa: la realidad

no interesa; su visión

traspasa las tesituras

del fabulario.

 

 

 

En la ceguedad iluminada

-origen y devenir de las formas-

él me ve mucho más allá de mí,

él se ve.

 

Yo no logro verlo, apenas

me aproximo a su substancia

de símbolos y significados

-si eso es posible.

 

Ël dialoga con los muertos

y percibe más allá de las evidencias

y, negando la propia existencia,

nos descubre.

 

Pues, es de descubrimientos y desasombros

que construímos nuestros espejos

en el laberinto infinito e imperfecto

de las revelaciones.

 

Como Dante y su Poeta preferido

yendo a los epicentros de la condición

humana, a sus proyecciones

y representaciones.

 

Con Borges, el mago, el vidente

un pre-socrático, un demiurgo

un transgresor por vía de los cuestiona-

mientos.

 

jardinespiral.jpg

NOSTALGIA DEL FUTURO

 

Poema de Antonio Miranda

Para Hilda Lontra
Traducción: TRINA QUIÑONES (Caracas, 2.004) 

 

Tanto quise hacer
y me contuve.
Tanto quise ser.

Me imaginé tantas veces
donde nunca estuve.

De niño, era adulto
sin poder
para ocupar espacios
que se me negaban.

Amores!
Deseé a cuántos
y amé a tantos
sin tenerlos
(con cuántos, por tantos)
por contradecirlos
-lo sé bien.

Temores!
Prefería lo imposible.
Me proyecté en situaciones
que luego postergaba
por no satisfacerme.

Insaciable
por lo no vivido
y anhelado
frustrado por lo que sentía
al tener lo que había
superado.

Viví anticipadamente
lo que no había ocurrido
y perdoné
tantas veces
descuidadamente
lo que sentía.

Era feliz
y no lo sabía
-dice el estribillo
que yo no creía
porque –entonces-
para mí
la felicidad
era siempre futura
en mi
(postiza, intelectual)
amargura.

 

 


AntonioMiranda.jpg

Antonio Miranda  nació en Brasil en 1940 y ha vivido en diversos países del continente (Argentina, Colombia, Puerto Rico y Venezuela) y es uno de los fundadores del grupo de teatro Rajatabla de Caracas que se inició con el espectáculo musical TU PAÍS ESTÁ FELIZ con sus poemas y canciones de Xulio Formoso. Ha publicado muchos libros de poesía, novelas, cuentos y ensayos. Publica el Portal de Poesía Iberoamericana en su página www.antoniomiranda.com.br en versión bilingüe portugués y castellano.

 

Contactar con el Autor

herederos del caos